Nombre Botanico: Eugenia caryophyllus
El aceite esencial de Eugenia caryophyllus orgánico se extrae de los capullos secos del clavo de olor mediante destilación al vapor. Es uno de los aceites con mayor concentración de eugenol, molécula responsable de sus potentes propiedades analgésicas, antimicrobianas y antioxidantes. Tradicionalmente se ha utilizado para aliviar molestias musculares y dentales, también aporta sensación de calor y estabilidad emocional, transmite fuerza, vitalidad y protección, siendo ideal en masajes, mezclas revitalizantes y rituales de bienestar natural.
Principales Beneficios
- Potente acción antimicrobiana frente a bacterias y hongos.
- Analgésico natural, tradicionalmente usado para molestias dentales.
- Estimula la circulación y aporta calor en masajes musculares diluidos.
- Refuerza el sistema inmunológico en épocas de resfriados.
- Antioxidante, útil para proteger contra el estrés oxidativo
Descripción Aromática
Aroma cálido, especiado y ligeramente amaderado, con notas dulces e intensas. Estimulante, tonificante y reconfortante.
Presentaciones:
5ml (100 gotas)- 10ml (200 gotas)
*La duración del aceite varia según el uso y cantidad de gotas por aplicación
Método de Obtención
Destilación por arrastre de vapor de los capullos secos.
Parte de la Planta
Capullos florales secos.
Principales Componentes
- Eugenol (mayoritario)
- Acetato de eugenilo
- Beta-cariofileno
- Isoeugenol
- Alfa-humuleno
Uso Aromático
Para obtener sus beneficios, añadir de 4 a 7 gotas de aceite esencial en el tanque de agua del difusor ultrasónico y programar sesiones de 15–30 minutos. Esta práctica favorece la dispersión uniforme de los compuestos volátiles en el ambiente, permitiendo una inhalación segura y eficaz.
Otra alternativa es aplicar 1–2 gotas en la palma de las manos, frotar suavemente y realizar inhalaciones profundas y conscientes. Esta vía estimula directamente el sistema límbico a través del bulbo olfativo, modulando estados de ánimo y respuestas fisiológicas.
Uso Tópico
Nuestros aceites esenciales son 100 % puros y naturales, sin diluyentes ni aditivos. Aunque técnicamente podrían aplicarse de forma directa sobre la piel, no es recomendable debido a su alta concentración, la cual puede causar irritación o sensibilidad cutánea. Además, por su bajo peso molecular y alta volatilidad, los aceites esenciales tienden a evaporarse más rápido de lo que la piel logra absorberlos, lo que limita el aprovechamiento de sus beneficios terapéuticos.
Por esta razón, si deseas utilizarlos de manera tópica, te recomendamos
- Siempre diluir en un aceite portador (ejemplo: coco fraccionado, almendra dulce o jojoba) para mejorar la biodisponibilidad y reducir riesgos de irritación.
- Durante un masaje suave, el aumento de la microcirculación favorece la distribución del aceite, potenciando su efecto tanto en la zona aplicada como a nivel general.
- La dosis de dilución debe ajustarse a factores individuales como edad, constitución física y estado de salud:
Adultos: 2–3 % (aprox. 6–9 gotas en 15 ml de aceite portador).
Niños y personas sensibles: 0,5–1 %.
Advertencias
- No ingerir salvo bajo la guía de un profesional médico-aromaterapeuta calificado.
- Realizar siempre una prueba de parche cutáneo en una zona pequeña (antebrazo o pliegue interno del codo) tras dilución adecuada.
- Evitar contacto con ojos, mucosas y heridas abiertas.
- En embarazo, lactancia o condiciones médicas específicas, consultar previamente con un especialista.
Almacenamiento
Conservar en frasco ámbar, bien cerrado, en un lugar fresco (15–25 °C), seco y protegido de la luz solar. Mantener fuera del alcance de los niños.
Ficha Técnica
*100% Devolución del dinero. Leer más